Lennon...

31 años ya... y quién lo diría... mientras escribo esto, mis manos en el teclado empezaron a temblar, al recordar la forma tan absurda, asquerosa y cruel que tuvo John Lennon de morir un 8 de Diciembre de 1980. De una forma que nadie querría. De esa forma tan absurda que a manos de un esquizofrénico sin ningún tipo de escrúpulo, acabó con su vida. De unos tiros que no tenían forma de ser.

Un hombre que se labró un porvenir sólido en la música y un nombre dentro del pacifismo, porque John era sobretodo, pacifista. Deseaba la paz con todas sus fuerzas, tanto físicas, como psíquicas. Que el mundo no sufriera guerras ni desastres de ningún tipo. Que los gobernantes, aprendan de este hombre, a ver si nos ponemos a pensar un poco, que lo malo y lo catastrófico no nos puede llevar a nada positivo. Y cuando digo gobernantes, digo Rajoy, Sarkozy, Merkel y otras hierbas parecidas.

31 años, que se dice pronto. Dejó sola a Yoko, aún en contra de su voluntad, de forma forzosa y cruel, dejó al único amor de su vida, con el recuerdo permanente de alguien que quieres, que se te ha ido para siempre y ya no volverá más. Se fue por la culpa de un asesino psicópata, con risa de esquizofrénico y mente fría y enferma, y que ahora, en la actualidad, sigue entre rejas, pagando el daño irreparable que ha causado.

"Imagina que no hay cielo"... "Imagina a la gente, compartiendo paz"... imagina, una vida gracias a John Lennon... paz... en aquella cama pidiendo paz junto a Yoko, que ambos se desnudaran por pedir paz, que se manifestaran por pedir paz... todo, todo por la paz. Porque paz era John... y John quería decir PAZ.

31 años y aún su recuerdo perdura. Una grandísima pérdida, una grandísima conmoción y una década que se hizo pedazos con su desaparición.

All you need is love...