Tal como éramos. (II).Viviendas SEAT. (Un pequeño pueblo dentro de la Zona Franca).

Se me ocurre empezar con el popular comienzo de "Erase una vez..." este comentario. Porque este comentario es para explicarlo a modo de un cuento. De un pequeñito pueblo dentro de una barriada.
Estas viviendas que pertenecían a una barriada llamada "La Marina" dentro del barrio de la Zona Franca, pertenecían a la empresa automovilística SEAT, y fue construída para los trabajadores que venían principalmente, de otras comunidades de nuestro país. También, se llamaban bajo el nombre de San Cristóbal, o actualmente, Sant Cristófol.
La gran ventaja que tenían estas viviendas, residía en que tenían sus propios servicios. Su ambulatorio, su cooperativa, donde se vendían artículos de primera necesidad y alimentos, su guardería infantil, sus colegios, cuyas maestros eran curas y monjas, por tanto, exigían disciplina muy severa tanto a los niños como a las niñas. Hay que decir que eran colegios separatistas, en el sentido en que un colegio era de niños y otro de niñas. En el de niños era el colegio de Nuestra Señora del Pilar y el de las niñas el de Nuestra Señora del Loreto. . El quid de la cuestión principal era, por así decirlo y bajo el temor de que pueda equivocarme, la fomentación del compañerismo y la convivencia entre los alumnos y alumnas. Vamos... creo que era el motivo, estoy convencido de ello. También tenían su propio cine. El cine Capri.
En estas viviendas, como dije anteriormente, venían gente de otras regiones y provincias a probar fortuna a Barcelona, y lo han conseguido. Gente que se arriesgaron a todo o nada, que con gran esfuerzo, han levantado la compañía a través de los años, con tesón e ilusión, gente que eran padres y que ahora son los hijos, los que están dentro de ella, llevando la imagen de la marca, donde vayan... Esto, en parte, es una gran recompensa para todos ellos. Hay maneras tan grandes de hacer las cosas, con gran sacrificio y entrega, como la mayoría de trabajadores (que digo la mayoría: TODOS!!!) los que han levantado la gran losa de llevar entre todos juntos la SEAT, así como es modelo de compañerismo, de amistad y de convivencia...
Otra cosa que me ha sorprendido de verdad, ha sido que los trabajadores y los vecinos, tenían sus propios equipamientos deportivos, donde jugar a fútbol, baloncesto, natación, frontón... un estilo de vida que dentro de estas viviendas era envidiable, donde después de la dura jornada dentro de la fábrica, se olvidaban de todo y se relajaban practicando estos deportes.
El gran pueblecito que estaba dentro del núcleo de la Zona Franca, aún sigue existiendo, pero me da en la nariz de que ya carece del encanto de hace unos años, es normal que con los años se pierda esta esencia, tiene que evolucionar, para mejor o para peor, pero tiene que evolucionar.
La de recuerdos que os vendrán a todos cuando de pequeños o de jóvenes, habíais vivido tanto intensamente, los primeros juegos, los primeros amigos, los primeros amores, siempre tan inocentes y sin pensar en lo que venían seguidamente, una unión matrimonial y unos hijos, esos hijos que ahora son trabajadores en la actualidad, que también ahora, son padres y abuelos, generaciones de gente que han visto   como en esos edificios, se han visto tantos secretos y tantas confidencias, que seguramente, no salen a la luz, como promesas cumplidas... "Yo te prometo que voy a quererte todos los días de mi vida", "Juro que lo que me has contado, no lo sabrá nadie, solo lo sabremos nosotros, que guardaremos el secreto...", "Siempre tendrás un amigo". "Si necesitas hablar, cuando estés triste o tengas ganas de llorar, aquí estoy yo y estaré"... "Siempre tendrás un hombro en que apoyarte." A lo mejor, son cosas blandengues, pero alguna vez se habrán dicho. No lo dudo.
Estaba redactando este último párrafo y me imagino a toda esta gente, diciéndose todas estas cosas, de forma sincera, con todo el sentido de la amistad posible, esto os puedo asegurar, he sentido como un escalofrío en el cuerpo, de pensar que de forma tan auténtica, hay amigos, amigas, novios y novias, que se hayan dicho estas cosas tan maravillosas y tan reales... Yo os digo a todos: "Si queréis hablar, aunque sea a través de estas páginas, encantado de verdad de hablar con esta gente que ha vivido en las viviendas de la Seat y querer compartirlas conmigo, de todo corazón. Me gustaría daros un gran abrazo y que tengáis estos recuerdos tan valiosos y que habéis pasado con tal pasión y ganas de disfrutarlo cada minuto de vuestra vida"...